Miles de migrantes mueren en busca del “Sueño americano”

El Tapón de Darién y la frontera con Estados Unidos son los puntos más mortíferos.

Millones de migrantes transfronterizos en América anhelan mejores condiciones socioeconómicas. Solo en el 2021, se registraron más de cinco millones de migrantes en el continente, según datos de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).

Lo lamentable es que, por su desesperación, miles de ellos mueren asfixiados, ahogados y masacrados sobre todo en el Tapón de Darién, ubicado entre Colombia y Panamá, y en la frontera con Estados Unidos.

Más de 6.000 migrantes han sido reportados como desaparecidos o muertos en América desde 2014 hasta hoy, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). El 60% de los decesos tuvieron lugar en la frontera entre México y Estados Unidos. Mientras que unas 1.750 personas murieron ahogadas, en el río Bravo, frontera natural entre México y Estados Unidos; la falta de agua, alimentos y de un sitio para quedarse costó la vida a 861 personas. Otros migrantes fueron víctimas de la violencia, de accidentes o murieron por viajar en condiciones infrahumanas.

Otra de las problemáticas que enfrentan las personas es que, cruzando el continente con sus pertenencias y familias a cuestas, se convierten en víctimas de los grupos criminales. Se ha comprobado que muchos de ellos sufren extorsiones, violencia sexual y robos.

Cambios en las dinámicas migratorias

De acuerdo con Maureen Meyer, funcionaria de Washington Office on Latin America (WOLA), las dinámicas migratorias cambiaron por el fuerte impacto económico provocado por la pandemia. Esto ha ocasionado que no solo se vea migrar a centroamericanos y mexicanos, sino también a sudamericanos y haitianos.

Otras de las variaciones observadas es que los migrantes no solo están considerando a Estados Unidos como una opción para cumplir su «sueño americano». Otros destinos como México, Colombia, Ecuador, Perú, Costa Rica, Chile, Canadá y Brasil, se han convertido en importantes destinos migratorios, así lo explicó William Spindler, portavoz de ACNUR para América Latina en DW.

Fuente: DW

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